La vuelta del Lujo: ¿Un buen momento para el desembarco o una llegada tardía?
Las marcas premium internacionales vuelven a elegir a la Argentina, pero hay algo diferente a lo que sucedió en los ’90. El mercado es el mismo, las marcas también, ¿qué pasa con el consumo y con la percepción del lujo para los consumidores? ¿Acaso lo que era considerado lujoso en un momento ahora ya no lo es?
Las principales marcas de moda, joyas y lifestyle internacionales, volvieron a poner la mira en la Argentina, pero está vez con un perfil más bajo y de la mano de socios locales.
Y es que los cambios en materia de importaciones y la eliminación del cepo que había impuesto el gobierno de Cristina Kirchner, facilitaron el camino para el regreso de aquellas marcas que se fueron del país allá por el 2011, y abrieron las puertas a la llegada de algunas nuevas.
Entre las que regresaron se encuentran Calvin Klein y Ermenegildo Zegna. Las que están debutando en el país son Zadig & Voltaire, Vilebrequin, Paule Ka, Custo Barcelona, Bally y Pandora, mientras que en el mercado local aseguran que es inminente el desembarco de otras compañías de peso, como Carolina Herrera, Prada, Loewe y Tom Ford.
Se suma a la lista Louis Vuitton, que ya tiene planes de regresar al país pero esta vez bajo el formato de pop up store en el shopping Patio Bullrich, que en principio sería por seis meses.
El gran interrogante es si en nuestro país existe un mercado para este tipo de marcas. ¿En la actualidad este tipo de productos ya no son considerado lujo, o bien lo son para unos pocos?
Gustavo Lento, especialista del mundo de la moda y el diseño de autor en nuestro país, considera que el lujo en los últimos años ha ingresado en una etapa de cambios donde la sociedad reordena prioridades y establece nuevas valoraciones a los objetos materiales.
¿Crees que la vuelta de estas marcas indican una confianza hacia el país?
No creo que sea un voto de confianza al país, sino que tiene que ver con que las políticas económicas de este gobierno facilitan la entrada de las marcas internacionales.
¿Consideras que la percepción del lujo está cambiando en la sociedad?
Creo que la nueva manera de pensar el lujo de la sociedad en este momento tiene que ver con nuevas búsquedas tanto económicas como políticas y culturales.
El lujo hoy toma otro carácter, se relaciona con ciertas cosas que perdimos de la naturaleza, el tiempo y la vida en general.
En el caso de naturaleza aparecen los conceptos de sostenibilidad, sustentabilidad, para frenar con esas pérdidas. En relación al tiempo la escasez está asociada con la cantidad de horas que trabajamos, la disminución del tiempo de ocio, esparcimiento y tiempo de vida.
El lujo se apodera de esas faltas y las lleva a un lugar ideológico comercial, de esta manera lo que es considerado lujo hoy, es tener tiempo, tener salud, pensar y ser partícipe de lo sustentable de lo sostenible.
Claramente esa ostentación de los ’90 muta a una idea de lujo totalmente diferente.
Referido al cambio en la percepción del lujo que comentabas: ¿crees que aún hay lugar para este tipo de mercado en la sociedad actual?
Es un poco controversial, ya que aquella parte de la población que puede acceder a esos artículos costosos, creo que lo va a seguir adquiriendo, como hasta ahora, en el exterior, en su lugar de origen, donde acceden además a colecciones exclusivas.
El lujo de lo que ingresa acá, es lujo estandarizado y no le interesa a ese tipo de sector. Podríamos si, crear subcategorías de consumidores a los que les podría llegar a interesar.
¿Cual crees o cual te gustaría que fuera el futuro del lujo en nuestro país?
Me gustaría pensar que se le pueda acercar a la sociedad Argentina un lujo más local.Tomar el lujo europeo es hacer una transcripción cultural de modos que no nos son propios. Nuestro lujo está asociado a los materiales que tenemos disponibles y son únicos en nuestra región deberíamos desarrollar un lujo sudamericano centrado en los diseñadores locales que trabajan con lanas merinos, plata repujada y todas las riquezas únicas que tenemos disponibles en la región